No les gusta a los "nacionalistas", a los sindicatos y a los "indignados" de última hora la cota de gasto que deberá estar en la Constitución, pero no les gusta por diferentes razones:
Alos nacionalistas porque ven que el pacto entre los dos grandes partidos les deja fuera o no les permite, mejor así, chantajear al gobierno de turno y arramplar con un montón de euros por cerrar los ojos y el hacerse, que lo hacen y muy bien, el imbécil. No, temen que se haya acabado el pozo sin fondo del chantaje continuado al gobierno y al pueblo español.
Lo temen los sindicatos, otro "grupeto" asiduo a la subvención y al chantaje. Los "lideres" de los trabajadores nunca lo fueron, viven y muy bien del cuento y se arriman al gobierno, sobre todo si es del Pz(oe) a recoger el fruto de su silencio o el fruto de su ruido, el que más convenga cada día.
Estos, más los añadidos de los descontentos que clamaban por un entendimiento entre el PP y Pz(oe) son los que más levantan el grito. Definitivamente no les conviene que la mayoría de los ciudadanos estemos de acuerdo; son ellos, deben ser ellos, los minoritarios los que impongan su criterio, al modo fascistas, a la mayoría imberbe y desatendida.
Deben sacar consecuencias los del PP y Pz(oe), con ellos y con una mínima sintonía entre ellos se acabaron los problemas del chantaje y opresión catalano - vasca. Basta ya de ordeñarnos, no quieren que haya techo en el gasto, no les importa empeñarse hasta el tuetamo con tal ser ellos los que marchan con el dinero, se hacen ricos y que el trabajador pague toda clase de crisis.
Se les ve el plumero.
Votar, votar Pz(oe)
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